El Madrid de espadachines, obras de Lope de Vega e intrigas cortesanas: Reseña 'Las Aventuras del Capitán Alatriste' de Arturo Pérez Reverte


Seguro que te has preguntado qué es lo que distingue a un libro bueno de uno malo. Pues se podrían dar muchas respuestas, pero creo que hay algo en lo que todos coincidiremos: Una trama trepidante que te mantiene en vilo, un vocabulario que sea claro y conciso a la vez que bello y descriptivo, historias de amor atemporales, atmósferas que existieron en el pasado o en la imaginación en las que desearíamos vivir… Y ante todo, personajes que sean a la vez míticos y realistas, carismáticos pero humanos, personajes a los que podamos admirar y a la vez comprender, en los que podamos encontrarnos de alguna manera: personajes inolvidables.


Pues os voy a soltar un bombazo: He encontrado una novela que cumpla todo eso. Mi última lectura veraniega: ‘Las Aventuras del Capitán Alatriste’, de Arturo Pérez Reverte. Una serie que comencé con muchas expectativas, y terminé completamente entusiasmada y enamorada. Aunque las aventuras completas trate de una serie de 7 novelas, yo solo hablaré del primer libro.


Sí, aparte de sonreír escépticos ante mi habitual entusiasmo y euforia infantil, probablemente os estaréis preguntando de qué trata esta novela de la que tan bien hablo. Pues, lo primero de todo, debemos sumergir nuestra mente en Madrid. Pero no el Madrid que conocemos, no una ciudad de turistas en la Gran Vía cargados de bolsas de ‘Primark’ y estaciones de metro abarrotadas, sino el Madrid de hace 400 años, el de los espadachines, la sede de la corte de Felipe IV, el Madrid de tabernas, pícaros, damas cortesanas, poetas, actores y dramaturgos del mejor teatro español, aventureros con boyante oro de las Américas, antiguos soldados de Flandes,… El Madrid de las obras de Lope de Vega, donde se respira el ambiente de los últimos años dorados imperiales españoles, un siglo lleno a la vez de decadencia y gloria. Un lugar donde que te traten de ‘vos’ en vez de ‘vuestra merced’ o que te quieran quitar el sitio en el corral de comedias son motivos perfectamente válidos para batirse en duelo singular. 


Esta ciudad, es el hogar del Capitan Alatriste, un soldado veterano de los tercios de Flandes que trabaja como espadachín a sueldo. Es decir, una especie de mercenario que vive de sus habilidades con la espalda. Su vida transcurre entre duelos y asaltos en una vieja posada cerca de lo que ahora sería la Plaza Mayor, siempre rodeado de amigos aficionados a las tabernas, el vino, comedias de Lope y el esgrima. Si os digo que mencionar la más mínima virtud del poeta Góngora es otra razón de peso para batirse en duelo, seguro que podéis adivinar el nombre de un gran amigo de Alatriste: Francisco de Quevedo. Una figura mítica que es resucitada con gran respeto y diligencia, cuyos diálogos están llenos de humor e ingenio. 


Todo cambiará para Alatriste cuando reciba un encargo muy misterioso. Sus decisiones le llevarán a envolverse en un conflicto diplomático que involucrará a los altos mandos de la España de Felipe IV: Desde el mismísimo Conde-Duque de Olivares hasta el más implacable inquisidor. Todo se entrelazará en una historia como las de antes: Duelos, esgrima, amor e intrigas cortesanas. 


Me pregunto si os habrá resultado atractiva esta sinopsis: ¿Estamos hablando de un ensayo del Siglo de Oro español o de una novela de aventuras? Pues, historia y aventura se complementan a la perfección en esta novela. Pero tranquilos, no hace falta que os gusten estos temas para leer este libro, porque ante todo, ‘Alatriste’ es una novela de aventuras. Tiene todo lo que ya he mencionado para ser un buen libro. Su brevedad, su habilidad para mantenerte enganchado y sus diálogos hábiles y cómicos van a hacer que no puedas parar de pasar las páginas. El mundo de Alatriste es uno de esos lugares que acogen al lector entre sus brazos y lo hacen sentir agusto y cómodo. Y ese es su secreto: no vas a querer salir. Sin embargo, lo que realmente conquista a los lectores de Alatriste no es su mundo, sino sus personajes. El Capitán Alatriste es un personaje valeroso, fiel a sí mismo y a sus propias reglas, que arriesga su vida por sus compañeros mil veces. Además, Alatriste presenta los típicos valores militares: su fidelidad al rey está por encima de todo. Da igual cómo se comporte el rey, porque Alatriste ante todo busca el bien de España. No obstante, Alatriste no es un héroe. Sabe que su espada ha atravesado a muchos hombres inocentes y el arrepentimiento le reconcome profundamente. Y eso es lo que lo hace un personaje humano y profundo. Además, debemos destacar al que es sin duda el mejor personaje: Francisco de Quevedo. Reverte transforma a Quevedo: Convierte a la figura en personaje, lo convierte en una persona que habla, piensa, siente e intenta hacer reír a los demás. La humanización de Quevedo es magistral. Ingenioso, cómico, temperamental, siempre buscando pelea y mascullando versos, nunca pierde ocasión de recitarnos alguna estrofa ya sea compuesta por sí mismo o por Lope. Asiduo cliente de tabernas, y a pesar de su cojera, gran espadachín con una sorprendente habilidad para meterse en líos y ser desterrado de la corte con demasiada frecuencia. Aunque Quevedo es el más destacado, todos los personajes históricos que aparecen son descritos con muchos detalles y rigor histórico, justo como aparecen en las pinturas de la época. 


Sin embargo, hay algo que hace que muchas personas se enamoren de este libro, algo que va mucho más allá de espadas y duelos… Porque en el fondo, ‘El Capitán Alatriste’ es una profunda carta de amor a España, es una oda a nuestra historia, es a la vez un lamento y una celebración de lo que fuimos y lo que somos, de lo que ganamos y lo que perdimos. El narrador hace una continua reflexión de la situación social y política del siglo XVII. Qué hicieron nuestros reyes en esos años que llevaron a nuestro esplendoroso imperio a la decadencia, qué tuvo el pueblo que ver, cúal era la filosofía de vida entonces… Reverte desmiente rumores, da una patada a la leyenda negra y cambia la visión típica de muchos personajes, como el Conde-Duque de Olivares. Y aunque haya algunas páginas cargadas de derrotismo (visión muy barroca, por otra parte), la reacción no debe ser la resignación o el abandono. No, hay que conocer la historia para comprender el presente, para poner nuestro granito de arena para arreglar los problemas de la actualidad.


En conclusión, ‘El Capitán Alatriste’ huele a clásico, huele a espadachines e intrigas, huele a acción y aventuras. Y ante todo, ‘Alatriste’ es para aquellos que aman a España. Pero no aquellos que la creen una nación grande y sin defectos, no, es para aquellos que a pesar de conocer sus errores y sus desgracias, la comprenden y la siguen amando. Es para aquellos que sienten el corazón henchido de orgullo cuando contemplan los fuertes y seguros pilares de una catedral: Es para los fascinados por nuestra historia. ‘Alatriste’ es una celebración de la aventura, de la valentía, de los amigos y los camaradas, del amor incondicional… Y sobre todo, es una celebración de la leyenda viva que es España. 

Elena Pastor 

Artículo originalmente publicado en: Revista Por los pasillos

PD para mis seguidores antiguos:

¡Hola a todos!

Sí, lo sé, parece que han crecido telarañas en este blog. Resulta que en este tiempo hemos tenido la oportunidad de hacer un proyecto mucho más grande que ha absorbido todo nuestro tiempo. Durante estos meses pensaba que no eran compatibles, pero, he descubierto que aunque las cosas se publiquen dos veces, este espacio puede seguir ayudándome a difundir mis reseñas y artículos, y de ahora en adelante volverá a tener actividad cada cierto tiempo.

Muchas gracias a todos los que habéis estado con nosotros desde el inicio, nunca habríamos podido comenzar esta aventura sin vosotros. 

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2 Comentarios

Alfonso Arties ha dicho que…
Cuánto tiempo hacía que no escribis. Como no colgabais nada últimamente, me he dedicado a leer revistas culturales y de actualidad publicadas por editores independientes.
Alfonso Arties ha dicho que…
El caso es que me suena esta crítica literaria..... ¿Lo habéis publicado en otro sitio?